Tras un largo recorrido en las pasarelas, cine, televisión, la actriz Ana Rujas ha impulsado Cardo, potente proyecto que llegó a AtresPlayer Premium y que cuenta con la rúbrica de los creadores de Veneno y Paquita Salas.
Sobre una idea original de Rujas, y dirigida por Claudia Costrafreda, Cardo es producida por Los Javis. y Haciendo Cine pudo dialogar con la intérprete.
¿Cómo se vive el estreno y el lanzamiento mundial?
Con muchos nervios, con ganas que se estrene ya porque llevamos mucho tiempo ya: un año y medio, dos años. Queremos saber qué dice la gente; qué opina.
¿Cómo fue la comunión con Claudia para sacar adelante el proyecto?
La conocí porque fui jurado en un festival de cortos y me enamoré de su corto. La empecé a seguir en las redes y desde entonces nos seguimos. Me gustaba su trabajo y cuando les llevé la idea a Los Javis, recogí unas ideas y mi imaginario y mi mundo me juntaron con Claudia. Me parecía increíble porque me gustaba lo que hacía y ha sido increíble trabajar con ella.
¿Cómo fue entrar en el personaje y qué tanto tiene de vos?
De mí tiene bastante, al igual que de Claudia y de todas. Creo que María somos un poco todas. Fue difícil porque el personaje está muy en contacto con la oscuridad, muy determinada y concreta y para no tocarla bebe, se pone una raya o se pone a tomar. Empieza a entrar en contraste con el dolor, que lo quiere tapar. Eso es lo más difícil, eso de querer salir constantemente con él.
¿Te llevaste algo para tu vida?
Me llevo la fuerza que tiene María y que no juzga a nadie.
La serie es muy valiente, dialoga con otros proyectos como «I may destroy you». ¿Sensaciones de ser parte de un proyecto así con la mujer en el frente de manera tan potente?
Es muy importante que lleguen este tipo de papeles a la pantalla y que muchos hombres y mujeres puedan identificar lo que es un abuso, lo que significa estar sometida al sistema, porque María está sometida al sistema y termina tomando malas decisiones. Es necesario más series que amplifiquen el altavoz, sobre todo cuando hemos sido víctimas de todo esto, y la clave era no juzgar a María, porque ella no lo hace. Se está despertando en el feminismo, le han pasado muchas cosas porque el mismo sistema la ha llevado a permitir muchas cosas.
Ella no juzga, pero en la prensa ya le ponen etiquetas como “transgresora”, por ejemplo, ¿Cómo ves esto?
No tendrían que existir las etiquetas, sino que tendría que haber muchas series más así. No quisimos ni nosotros mismos ponernos etiquetas, pero nuestra pretensión era contar algo muy honestamente. Yo misma la vería.
¿Van a seguir trabajando en dupla?
En principio, sí. Queremos hacer varias cosas, tenemos ideas, pero Claudia tiene su película, yo tengo mis proyectos. Estamos muy hermanadas y queremos seguir con este binomio que ha funcionado muy bien así.