PCI presenta «Sala Virtual» a través de su plataforma

La misma incluye 3 "salas" a través de las cuales podrán verse estrenos en exclusiva, exhibiciones y ciclos. Hablamos con Martín Desalvo para conocer más sobre la propuesta.

Aquello que empezó como una manera de acompañar a los ciudadanos y difundir la producción cinematográfica independiente, ya se convirtió en una plataforma de exhibición y difusión clave para los tiempos que corren.

La Asociación de Directores de Cine PCI es una asociación civil sin fines de lucro que nuclea a directores de cine argentinos. Fue creada en 1999, no como un grupo estético, sino como una forma de agrupar a varios de los realizadores que renovaron la cinematografía argentina.

En este camino decidieron avanzar con una nueva manera de llegar al público tras el éxito de “Cuarentena de película” creando tres salas para la difusión, exhibición y promoción de películas locales en un nuevo proyecto: CINE VIRTUAL.

“La idea es armar salas virtuales en las que el público pueda acceder, como cuando va al cine, a diferentes propuestas. En una de ellas habrá estrenos absolutos, películas que podrá alquilar como VOD por un tiempo, en otra se proyectarán con la idea de una curaduría ciclos, y en una tercera estamos pensando subir materiales de trabajo, guiones, cartas de intención, y charlas entre directores”, indica Martín Desalvo, secretario de la Entidad.

“Este tiempo nos sirvió para imaginar cuestiones asociadas a la exhibición y distribución, que ya veníamos trabajando pero que con la pandemia se profundizaron. La iniciativa tuvo buena repercusión y por eso decidimos ir por más con la posibilidad de estrenar por un valor y mantener la gratuidad de otros proyectos en otra de las salas”. Agrega.

Formalmente indican que la sala de cine virtual servirá para hacer frente a la época de pandemia que tiene a las salas de cine cerradas. Nosotros replicaremos de manera virtual el modelo de programación de una sala de cine tradicional. Esto quiere decir que la programación se realizará en el plazo de la semana cinematográfica, manteniendo el jueves como el día de estreno y continuando o discontinuando la programación semanalmente.

“Una película que estrenemos de acuerdo a como funcione se mantendrá o se reprogramará, no vamos a ir con la media de sala, pero sí estaremos evaluando cómo funciona. En ese caso se proyectará otra, y así sucesivamente”, dice Desalvo.

Una película que se estrene un jueves y deberá ser re-confirmada para la programación para la semana del jueves siguiente, y subsiguientes, etc. Exactamente como lo hace una sala de cine. Esto posibilitaría, además, poder ingresar el impuesto cinematográfico del 10% al Fondo de Fomento Cinematográfico, lo que como directores y miembros de la industria del cine vemos como una necesidad ante la situación de salas cerradas.

La sala de cine también programará ciclos de revisión totalmente gratuitos y contenidos diversos como fichas de películas, la posibilidad de reseñar los films por parte de los espectadores, charlas virtuales con los/as directores/as, charlas con especialistas, entre otros.

Consultado por la posibilidad de exhibición de películas de realizadores que no son miembros de la entidad, Desalvo comenta que se podrá hacer accediendo a las convocatorias para ser parte del programa Puentes de cine, que trimestralmente renueva su proyección. También confirma la presentación de películas de cine arte extranjeras.

El 14 de mayo se estrenará en esta nueva sala “Canela” de Cecilia del Valle centrada en la vida de una mujer trans en la búsqueda de su pleno reconocimiento. El costo para verla por 48 horas será de $160, a través de MercadoLibre en la plataforma de Puentes de cine. $50 de la recaudación será para el acompañamiento de personas trans de todo el país a través de las organizaciones y redes de la Liga LBTIQ+ de las Provincias.

Más artículos
Festival de Berlín: la española «Alcarrás» se llevó el premio mayor